Más de dos tercios de la población en Europa vive en entornos urbanos o semiurbanos. Hablar de mejoras en las condiciones sociales, económicas y medioambientales de nuestro continente es en gran medida hablar de desarrollo urbano sostenible.

Con el aumento generalizado del consumo, la gestión de nuestros residuos es ahora más importante que nunca. Los ciudadanos muchas veces no somos totalmente conscientes de nuestro papel en este proceso. Podemos decir que la gestión de residuos se inicia en nuestra propia casa. De hecho, podríamos considerar que empieza antes, en las tiendas y supermercados, cuando tomamos nuestras decisiones de compra.

Nos llegan muchas preguntas sobre los contenedores soterrados, o en nuestro caso más apropiado sería decir semi soterrados, ya que la mayor parte del contenedor queda bajo tierra pero otra parte sobresale a la superficie. Para aquellos interesados en contenedores soterrados para el municipio o para un proyecto, hemos preparado una lista con las preguntas más frecuentes confiando que pueda servir de ayuda.

¿Qué tipo de contenedor de residuos es el que mejor encaja en lugares turísticos? ¿Cómo puede mejorar la gestión de los residuos y estar en armonía con la belleza del lugar ya sea centro urbano, playa, montaña o zona rural? 

En este post vamos a analizar cuales son las características importantes que se han de tener en cuenta para elegir una solución que consiga mejorar la gestión de residuos, aumentar el reciclaje y ganar en higiene, accesibilidad y estética.

Las innovaciones que más perduran y más mejoran con el tiempo suelen estar basadas en ideas simples. Sin duda, este es el caso de los contenedores de residuos Molok. ¿Quién hubiera pensado hace 30 años que un contenedor de residuos llamado Molok y producido en un pequeño taller de aldea, instalado en un antiguo granero, se propondría cambiar la gestión tradicional de residuos y ganarse el corazón de millones de personas en todo el mundo? El inventor del sistema Molok, el empresario finlandés Veikko Salli, confió en su idea única y desarrolló un contenedor de residuos parcialmente enterrado. El sistema sigue la misma lógica que las viejas fresqueras o neveros: como los contenedores permanecen frescos y protegidos de la luz solar, la actividad microbiana dentro del contenedor de residuos se reduce, lo que ralentiza el proceso de descomposición. 

Los residuos orgánicos, también llamados biorresiduos, son residuos de origen orgánico, en descomposición, típicamente de cocina. A día de hoy, en nuestro país, la mayoría de estos residuos no se separan correctamente por lo que muchos acaban en vertederos mezclados con el resto de desechos no recuperables. Separar los residuos orgánicos genera beneficios medioambientales y económicos.

Es lógico que surjan muchas preguntas sobre el reciclaje de esta nueva fracción. En este post, hemos reunido las dudas más frecuentes sobre residuos orgánicos.

La nieve y las bajas temperaturas causan numerosas complicaciones todos los años. Una de las que más afecta a los ciudadanos son los problemas relacionados con los contenedores de basura y con el servicio de recogida de residuos urbanos. En este post hablaremos de cómo estar preparados para ofrecer un mejor servicio ante estas circunstancias.

La gestión de residuos municipales es una tarea compleja que supone uno de los grandes retos para las administraciones públicas. La retirada de residuos domésticos para su traslado a plantas de tratamiento o vertedero es una de las actividades clave en este proceso. No se trata sólo de "Quitar la basura de la calle" sino que existen otros objetivos medioambientales, económicos y sociales, que los Ayuntamientos, como últimos responsables, deben velar por cumplir: reducción de emisiones, accesibilidad universal, reducción de los residuos, reutilización, reciclaje, mejora del entorno urbano, etc.

Tras tres décadas aportando soluciones innovadoras a nivel mundial, Molok da un paso más en optimización de espacio y en adaptabilidad con el contenedor soterrado modular MolokDomino: un nuevo enfoque que permite crear un espacio de almacenamiento de residuos compacto, higiénico y ordenado, completamente configurable.

Los residuos orgánicos requieren contenedores especialmente diseñados para esta fracción. Cambiar el color de un contenedor tradicional, de verde a marrón, no lo convierte en un contenedor adecuado para biorresiduos.